Que lata estudiar. Siempre desde que tengo uso de razón me da pereza todo lo que tenga que ver con el estudio. Una verdadera lata. Tengo que buscar la forma de encontrar alguna actividad que motive mi entretenimiento, tengo que tener una idea...
Ahora estoy enojada, estaba escribiendo una historia muy pintoresca sobre mi experiencia paranormal y apreté una tecla y borre todo lo que tenia! Que rabia más grande.
Recordé el verano pasado, lejano verano. Cuando disfrutaba el término de un excelente año (académicamente hablando), y estaba dedicada a juntar fuerzas para comenzar este con el mejor de los ánimos. Creo que nunca logre despegarme del verano.
Fui a verme la suerte, en un lindo día soleado, con el suertero familiar. Fuimos varios para hacer un pack y el suertero nos hiciera una rebaja por la atención. Cosa que no resulto. Él vive en una modesta casa en la parte periférica del a cuidad, cercana a la línea del tren, por no decir que pasa por el ante patio de su casa. Su tarjeta de presentación dice "Fotógrafo Profesional. Matrimonios, bautizos, fiestas, eventos especiales". Me pregunto por que no tiene una tarjeta que diga "suertero" como hacen otros de la misma especie.
Al entrar a su casa sentía una sensación muy extraña, nada que ver con alguna sensacion paranormal, sino que pensé que nadie puede decirte como será tu futuro ni siquiera decirte una aproximación de el.
Me senté en la cabecera de la mesa vidrio y el a un costado desenrollo un paño color marrón donde tenía las cartas españolas, un tanto sucias por el uso. Revolvió. Busco para mí la carta que me representaba, sota de bastos, creo. Revolvió. Hizo tres montones, del cual me hizo elegir uno.
Lo puso entremedio de los otros dos y comenzó a leer mi pasado, presente y futuro.
La verdad no recuerdo muy bien lo que me dijo. Pero si dijo. Este año será muy bueno para ti, mejor que el año que paso, te ira mejor en la universidad. Conocerás a un hombre trigueño en un viaje te sentirás muy bien con él. Va haber un cambio, será bueno el cambio?, pregunte. No recuerdo la respuesta. Ese día saque una bonita conclusión de mi experiencia, este año será lo máximo. Ahora concluyo que debí quedarme con mi primera impresión al entrar a esa casa.
Hasta el momento solo puedo hacer balances un tanto negativos. Pero ni tanto.
La verdad estoy desorientada.
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