29 septiembre 2006

En un andén

Me encontré con la desigualdad mental. Sentada, con una pierna menos a raíz de una infección gangrenosa, sucia, con cara de incredulidad y con la saliva colgando.
Que asco! pensé. Ese hombre es realmente repudiable.
No solo su aspecto físico era de intimidar, si no también, cualquier palabra que brotaría de su sucia boca. Grande, robusto, macetiado... la sencillez es lo último que pudiera pedir a ese hombre. No, no se puede conocer gente así... me deprime.

12 septiembre 2006

Y

Continuando.

Éramos tres distintas personas impactadas por una realidad tan ajena pero, que en aquel momento era tan nuestra, tan vivida...tan emocional... esas caras que vimos, las ganas que teníamos que se acabara todo pronto y las horas interminables de espera...el sueño, las preguntas que estaban demás. Una sinceridad que extremese...los silencios. Esos silencios que dicen demasiado, esos silencios que gritan. Hasta respirar parecía más fácil. Estaba todo bien, solo que nuestros cuerpos se sentían extraños, atrapados.
Mi presencia era fortuita. Un trío sin aristas.

02 septiembre 2006

Lealtad

De tanto aire que respiro, de tantas personas que veo todos los días... tantas veces que pase por el mismo lado, sin mirar, sin siquiera detenerme a... mirar. Mis palabras son nada.
Donde nos vinimos a encontrar, donde la hipocresía es nula o quizás donde más caretas tiene. Nos encontramos donde los lazos son más débiles, ahí, justo ahí en ese limite. Estábamos sentados.

Ya no es lo mismo, eso es lo bueno.